Personaje III: Papá
Oscar Adolfo Flores Sayler


Puedo tener amores importantes….muy importantes…pero tu siempre serás el hombre de mi vida….tu siempre has sido el hombre de mi vida.
Tu estas ahí, frente a todo, como una muralla que me defiende de lo indefendible, entregándome amor infinito e incondicional. Tu respondes a todas mis inseguridades sin hacerme sentir tonta, tu crees en todas mis virtudes y en las que no tengo, tu peleas por mi todos los días, tu me educas, tu me alimentas, tu me sostienes, tu me crías…si…aún lo haces…tu me diste la vida.
Cuando creo que todo va a explotar y los pedacitos que saldrán volando son míos…apareces tu…y vuelvo a tener 5 años y me preparo para ir a meterme a tu cama…a las 8 de la mañana de un sábado claro está…y me siento segura…y nada es tan grave.
Cuando estoy en la cima del mundo y no puedo estar más arriba…apareces tu…e inventas un estrato nuevo con el brillo de tus ojos y tu pecho inflado de orgullo…y me siento mejor aún…y nada es imposible.
Cuando pienso que algún día no vas a estar…se me llenan los ojos de lágrimas, el alma de pena, el mentón de pucheros, el corazón de desesperanza…pero al rato me doy cuenta que nunca no vas a estar ahí…somos inseparables… yo soy tu…y tu eres yo….(y Mendel te lo puede comprobar).
Cuando me sientas lejos mira la palma de tus manos y recuerda las mías (son iguales)…cuando te sientas triste recuerda alguna tontera de las mías (que son muchas)…cuando creas que te olvide espera que te haga un prrup prrup en el teléfono (yo siempre ahorro mis minutos…créeme).
Recuerdo todo…desde que te contaba la Blanca Nieves (con efectos de sonido)… hasta hoy. Te amo mucho; tu eres mi amigo, eres mi compadre, mi hijo, mi gordo…tu eres mi papá….corrijo…tu eres mi PAPITO.